Todos somos capaces de lograr grandes
metas, de cruzar altas montañas, todos tenemos dentro un gran mar de
sentimientos que nos hacen especiales y a la vez únicos. Cada persona somos un
mundo aparte, pero no entre abismos, somos mundos entrelazados. Todos
necesitamos a otros para sobrevivir, para sentirnos completos. Todos tenemos
esa persona que con un simple hola por la mañana nos alegra el día y nos hace
sentir bien. Puede ser tu madre, tu hermano o el amor de tu vida, pero todos la
tenemos, porque solo con pensar en ella algo brilla dentro de nosotros. Yo voy
a hablaros de la mía, y lo único que puedo contaros es que en mi vida he
encontrado alguien tan especial como es ella. Ella me cuenta historias, me
sorprende cada día y me cuida. Nunca me ha mostrado el lado malo de la vida
simplemente lo bueno. Ya desde pequeña luché contra viento y marea para hacerla
feliz y intento conseguirlo día a día. No puedo imaginar que algún día pueda
llegar a perderla, no sabría que hacer sin ella. Es una persona que siempre
confió en mí y me dijo que lograría grandes cosas. Me contó un día que ella
nunca había logrado nada en la vida, solo intentaba hacernos felices a todos,
porque en la vida solo había que pensar en hacer cosas buenas y esa es la única
manera de brillar. No tener mucho dinero, o infinidad de cosas, sino rodeándose
de grandes personas.
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